Una historia que incomoda (y refleja más de lo que parece)
El episodio “Bête Noire”, de la temporada 7 de Black Mirror, parte de una premisa inquietante: ¿qué pasa cuando lo que sentís, recordás o pensás es puesto en duda una y otra vez? Maria, la protagonista, atraviesa situaciones donde su percepción del mundo se distorsiona de forma sutil pero constante. Objetos movidos, agendas alteradas, emociones desestimadas. Lo que al principio parece un simple error, se vuelve una manipulación sistemática que la deja sin certezas. El resultado: confusión, angustia, aislamiento.
Esta ficción distópica amplifica algo que, lamentablemente, muchas personas viven a diario: el gaslighting.

¿Qué es el gaslighting y cómo impacta en la salud mental?
El gaslighting es una forma de manipulación emocional en la que una persona hace dudar a otra de su propia percepción, memoria o juicio. Puede aparecer en vínculos de pareja, familiares, laborales e incluso institucionales. Quien lo sufre suele sentirse confundid@, culpable o incapaz de confiar en su propia versión de los hechos.
A nivel psicológico, este tipo de manipulación sostenida puede provocar:
- Baja autoestima y sensación de invalidez.
- Dificultad para tomar decisiones o poner límites.
- Ansiedad, insomnio o síntomas depresivos.
- Desconexión emocional y confusión persistente.
Como muestra el capítulo, la distorsión de la realidad no solo afecta cómo nos relacionamos con los demás. También puede alterar la manera en que sentimos nuestro cuerpo, recordamos nuestro pasado y nos vinculamos emocionalmente. Cuando dudamos de lo que vivimos, todo se vuelve inestable: la confianza en uno mismo, las relaciones, incluso la forma de estar en el mundo.
Cuando la tecnología también manipula
Una de las particularidades del episodio es que la manipulación no ocurre solo desde el vínculo interpersonal. Verity, el personaje que manipula a Maria, utiliza un dispositivo que modifica la realidad según su voluntad. El gesto puede parecer exagerado, pero refleja una idea inquietante: la tecnología, lejos de ser neutral, puede potenciar dinámicas de poder y control.
En un mundo donde lo digital forma parte de nuestras interacciones cotidianas, también es importante preguntarnos:
- ¿Qué pasa cuando nuestras emociones son invalidadas a través de una pantalla?
- ¿Cómo discernir entre una percepción propia y una narrativa impuesta desde afuera?
La tecnología puede ser herramienta… o amplificador de heridas no resueltas.
Trauma y presente: lo que no se nombra, se repite
El episodio también deja entrever cómo el pasado no resuelto puede condicionar el presente. Verity justifica su comportamiento en un hecho de la adolescencia que, aunque Maria apenas recuerda, dejó una herida profunda. Esa herida no elaborada se transforma en una necesidad de venganza, de “ajustar” la realidad.
Y ahí aparece otra capa de lectura: cuando el dolor no es reconocido, puede buscar formas distorsionadas de expresarse. No para justificar el daño, pero sí para entender que muchas veces la violencia emocional tiene raíces más profundas. Reconocer esas raíces puede ser el primer paso para no seguir replicando lo que nos lastimó.
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Cómo saber si estás viviendo gaslighting?
Aunque cada situación es única, algunas señales pueden encender una alerta:
- Sientes que siempre estás exagerando o “siendo dramátic@”.
- Empiezas a dudar de tus recuerdos o emociones después de hablar con alguien.
- Te disculpas constantemente, incluso cuando no hiciste nada malo.
- Te sientes confundid@ o con culpa, pero no sabés bien por qué.
Si algo de esto resuena, es importante hablarlo con alguien de confianza o buscar acompañamiento profesional. Validar lo que sentimos es el primer paso para salir de dinámicas confusas.
Y en un mundo donde tantas veces se pone en duda lo que nos pasa, cultivar una autenticidad radical —esa que se anima a habitar y expresar lo que sentimos, aunque incomode— puede ser un acto profundamente reparador.
Reflexión final
Black Mirror no esquiva lo incómodo: lo usa para hacernos pensar. Este episodio no solo habla de tecnología, sino de vínculos, de poder, de percepción. Nos recuerda que la salud mental también se juega en lo cotidiano, en lo que creemos, sentimos y compartimos.
Y que cuando alguien invalida sistemáticamente nuestras emociones, lo que está en riesgo no es solo una relación: es nuestro vínculo con nosotr@s mism@s.
En este artículo encontrarás
Quizás el mayor aprendizaje sea este:
Que tu experiencia importa. Que tu percepción es válida. Que merecés relaciones donde la verdad se construya en común y no se imponga desde el miedo.
¿Qué señales aprendiste a escuchar para cuidar tu salud emocional?